Fase de retención en la ortodoncia. ¡No te la puedes saltar!

Fase de retención en la ortodoncia

La fase de retención en la ortodoncia es una parte importantísima de este tipo de tratamientos. Es tan relevante como el resto para que se cumplan los objetivos de estos aparatos. Has realizado una inversión significativa de tiempo, dinero y esfuerzos para lograr reposicionar tus dientes, así que te conviene seguir al pie de la letra los consejos para, una vez haberse desplazado en el sentido buscado por los tratamientos de ortodoncia, mantener sus resultados. No querrás echar a perder los resultados conseguidos. A continuación te explicamos las claves de la que conocemos como fase de mantenimiento.

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¿En qué consiste el mantenimiento tras la ortodoncia?

A grandes rasgos, se trata de colocar unos retenedores que servirán para consolidar las nuevas posiciones de los dientes generadas por los efectos recolocadores de los alineadores. Estos habrán resultado útiles para corregir inconvenientes como los apiñamientos, las maloclusiones y los desalineamientos. Pero, después de este logro, es básico que se comiencen a fijar las nuevas estructuras. Nos referimos al hueso y a los ligamentos periodontales.

En las siguientes líneas analizamos en profundidad por qué conviene que te pongas estos retenedores. Sigue leyendo.

¿De qué fases consta uno de estos tratamientos?

En primer lugar, has de tener en cuenta que los tratamientos ortodoncistas implican la sucesión de tres fases. Todas ellas son igual de imprescindibles para conseguir el éxito en el reposicionamiento de las piezas dentales.

Empezamos con la de estudio, que incluye el diagnóstico del caso particular, la realización de las radiografías y los escáneres y la elección del tratamiento.

En segundo lugar, la fase activa es la caracterizada por la aplicación de los aligners, que posibilitará los movimientos de los dientes perseguidos.

Finalmente llega la fase de retención, en la que damos tiempo a la consolidación de los tejidos que rodean a las piezas dentales y de sus respectivos huesos.

¿Por qué clase de retenedores puedes optar?

Sucede con ellos algo parecido a lo que ocurre con los alineadores. Puedes elegir tanto los fijos como los removibles. Ambos son igualmente efectivos, pero, como en los supuestos de los aligners, tienen pros y contras comparativos. Llevar los fijos prácticamente no se nota y los removibles tienen las comodidades de que son de quita y pon y solo tendrás que colocártelos por la noche. Una de las ventajas de los fijos es que no se te olvidará ponértelos.

Fase de retención en la ortodoncia

¿Cuánto tiempo debes llevar los retenedores?

Su uso se suele prolongar durante alrededor de un año. Si has escogido los retenedores removibles, sean estos fundas o aparatos, al principio los tendrás que llevar todo el día. Posteriormente ya podrás pasar a ponértelos solo por la noche.

La relevancia de su limpieza

Por último, acuérdate de que tienes que limpiar estos instrumentos para que no se acumulen en ellos bacterias y desechos de alimentos. También en el caso de los removibles. Usa para ello un cepillo de dientes, jabón neutro y los productos especiales que te pueda recomendar un odontólogo de confianza.

En definitiva, tómate en serio la fase de retención y sacarás el máximo partido a tu ortodoncia.