Cada vez con mayor frecuencia –seguramente por la influencia de los medios de comunicación- hay personas que se plantean un tratamiento estético con carillas dentales. Las carillas son un procedimiento de estética dental a través del cual colocaremos sobre tu diente natural una fina lámina de materiales como el composite, cerámica o porcelana que dará a tu sonrisa un nuevo aspecto. Principalmente, a través de esta técnica conseguimos para nuestros pacientes unos dientes más blancos y alineados, es decir, una sonrisa que se acerca más a esas que vemos por la tele y que asociamos -muchas veces de manera inconsciente- con el éxito, la fama y la belleza.
No obstante, la colocación de carillas estéticas no deja de ser un procedimiento odontológico en el que, antes de ponernos a trabajar, es básico tener en cuenta factores como el tamaño y color de tus dientes naturales, la forma de tu boca o tu mordida –por citar algunos- para conservar intacta la funcionalidad de tu boca. Nunca olvides que un buen profesional siempre te dirá que los dientes están para masticar y que, por encima de la estética, está la salud. Venimos ‘de serie’ con una boca y la naturaleza es tan sabia que cada boca es única, así que no te empeñes en tener la sonrisa perfecta de Penélope Cruz o Brad Pitt porque simplemente es imposible. Lo realmente perfecto es que sonrías, así que haremos todo lo posible no para que consigas LA sonrisa, sino TU sonrisa.
Bajo nuestro punto de vista, existen varias razones de peso en las que decantarse por un tratamiento con carillas estéticas. Si estás en alguno de estos casos, te invitamos a visitarnos para que te informemos sobre la mejor opción:
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Decoloración en tus dientes
La edad, los hábitos alimenticios, la genética, algunos tratamientos como la endodoncia o la toma de medicamentos que contienen tetraciclina pueden contribuir, en mayor o menor medida, a que tus dientes se vayan decolorando y no sea viable solucionarlo con un blanqueamiento dental profesional. Unos dientes decolorados pueden dar sensación de envejecimiento prematuro y descuido.
Ligera separación entre dientes
Ojo, porque hay defectos que solo son solucionables mediante ortodoncia. Es complicado explicar aquí qué grado de separación podemos solucionar con carillas, pero vaya por adelantado que deben ser separaciones e imperfecciones leves. Lo mismo cabe decir para dientes con diferencias de tamaño.
Dientes rotos o astillados
Tener un diente roto no es aconsejable. Primero porque resta funcionalidad a la boca y segundo porque seguramente se irá desgastando más y más con el tiempo. Puede llegar incluso a ser molesto para el propio paciente. La colocación de una carilla estética de composite o porcelana es totalmente recomendable.
Problemas de autoestima o miedo a sonreir
Reir, sonreir y enseñar los dientes es uno de los ejercicios más sanos que hay en esta vida. Por desgracia, hay pacientes a los que sus dientes acomplejan bastante y van poco a poco renunciando a este placer. No podemos decirte que las carillas sean la solución definitiva, pero en muchos casos, hemos recibido en consulta a personas aparentemente muy serias a las que hemos despedido con un nuevo brillo en los ojos. A veces un cambio externo puede ayudar a una transformación interna. Piénsalo.
