¿Qué es la alveolitis y cómo se trata?

Son muchas las personas que no quieren ir al dentista para evitar tener una complicación tras una extracción dental. Este proceso siempre va a requerir un periodo de postoperatorio y, entre las complicaciones que pueden surgir tras una extracción dental, además de la inflamación, destaca la alveolitis.

¿Qué es la alveolitis dental?

La alveolitis es la complicación principal tras la extracción dental, sobre todo en la exodoncia de las muelas del juicio. Cuando se extrae la pieza, se forma un coágulo de sangre en el agujero para que se proteja la herida. Gracias a él, el sangrado se frena y la herida puede recuperarse mejor.

Existen dos tipos de alveolitis:

– Alveolitis húmeda. Aquí el alveolo no está vacío y presenta un tejido oscuro y sangrante.

– Alveolitis seca. En este caso, el alveolo está vacío. No hay coágulo de sangre porque se ha desintegrado o extraído de forma accidental, y se puede observar el hueso de la cavidad, lo que retrasará el proceso de curación. Esta situación puede comportar dolor.

Cuando tienes alveolitis, se incrementa el riesgo de que puedas padecer una infección en la zona.

Claves para medir el dolor y detectar la alveolitis tras una extracción dental

Cuando te extraemos un diente es habitual que sientas dolor, por lo que es difícil averiguar si la intensidad es la normal o no. Si tras 48 horas la dolencia remite, no debes preocuparte, en cambio, si tras este tiempo el dolor sigue aumentando, es muy probable que tengas la temida alveolitis.

Esta afección no es muy grave, y si sigues las pautas que te indicamos como especialistas, sentirás una gran mejoría.

¿Cuál es el tratamiento más indicado si tras la extracción dental tienes una alveolitis?

El tratamiento de la alveolitis seca se enfoca en reducir los síntomas y aminorar también el dolor. Algunas de las acciones que te recomendamos son:

– Analgésicos que te prescribamos como especialistas. No te automediques.

– Enjuagues de la cavidad bucal. Al enjuagarla, eliminarás residuos o partículas de alimentos que contribuyen a aumentar el dolor y la posible infección.

– Vendajes con medicamentos. El cirujano dental podrá rellenar la cavidad bucal con medicamentos en forma de pasta, gel o cualquier otro vendaje impregnado en medicamentos. Esto puede aliviar el dolor rápidamente. La gravedad que aprecie tu dentista determinará la frecuencia del cambio de vendajes o si necesitas otro tipo de tratamiento.

– Cuidado personal. Al retirar el vendaje, nuestro dentista te dará una serie de instrucciones para que enjuagues la cavidad en casa y que así se favorezca la cicatrización y eliminación de residuos. Lo habitual es hacerlo con agua salada o con un enjuague determinado.

Es posible que notes una cierta mejoría y alivio del dolor cuando inicies el tratamiento. El resto de síntomas continuarán aliviándose y desaparecerán en unos días. No obstante, será necesario programar una serie de consultas con nuestro cirujano dental o dentista para que proceda a realizar los cambios de vendaje y otra serie de cuidados para eliminar la alveolitis producida tras una extracción dental.